Se publicó en el Diario Oficial (25 de octubre de 2022), el Protocolo Adicional a la Convención Americana sobre Derechos Humanos adoptado por la Organización de Estados Americanos (OEA), conocido como “Pacto de San José de Costa Rica”, en virtud del cual los Estados parte se comprometen a adoptar las medidas necesarias a fin de lograr progresivamente la plena efectividad de los derechos que establece el Protocolo.
Entre otros, se consagra el derecho al trabajo, que incluye la oportunidad de obtener los medios para llevar una vida digna y decorosa y supone que toda persona goce de trabajo en condiciones justas, equitativas y satisfactorias. Los Estados parte se comprometen a adoptar las medidas que garanticen la plena efectividad del derecho al trabajo, y a garantizar en la legislación nacional, de manera particular: una remuneración que asegure como mínimo las condiciones de subsistencia digna y decorosa, el derecho de los trabajadores a seguir su vocación y a cambiarse de empleo, como también a la promoción o ascenso dentro de su trabajo, considerando sus calificaciones, competencia, probidad y tiempo de servicio.
El Protocolo también consagra el derecho a la libertad sindical, el derecho a la huelga y el derecho a la seguridad social.